Ven, rozame lento,
que quiero sentirte dentro.
Tus manos en mi espalda,
tus labios en mi cuello.
Perdernos entre las sábanas,
no saber si es de noche o de día.
Enamorarme de cada uno de tus lunares,
sentir que eres especial.
Dormir escuchando los latidos de tu corazón,
sabiendo que late con fuerza
sólo porque mueres por verme un instante más.
Ven, hazme sentir especial, hazme saber que estás aquí.
Que si el mundo se acabase mañana, que me pille pecando junto a ti.
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